En Agbar Agriculture sabemos que llevar a cabo un proyecto agrícola exitoso requiere de un análisis exhaustivo y un estudio de viabilidad sólido. Es por eso que ofrecemos a agricultores e inversores una solución integral para asegurar el éxito de sus proyectos.
Los estudios de viabilidad de un proyecto, con independencia del sector al que pertenezca, siguen una serie de premisas que conviene tener en mente para su adecuado entendimiento. Dichas premisas podrían resumirse en cuatro conceptos clave:
1. Principio del valor del dinero en el tiempo.
El principio del valor del dinero en el tiempo establece que el valor de una unidad monetaria hoy es superior al valor de la misma unidad en el futuro. Esto se debe a que el dinero tiene la capacidad de generar rendimientos o intereses a lo largo del tiempo. De este modo, en base a una tasa predefinida (k), existen dos cálculos básicos relacionados al valor del dinero en el tiempo:
- Capitalizar: Proyección a futuro del valor de los flujos de caja presentes. Existen dos tipos bien diferenciados: Capitalización simple y compuesta. La primera sólo considera rendimientos en base a un capital inicial mientras que la segunda calcularía rendimientos sobre capital inicial y sobre rendimientos obtenidos previamente.
- Actualizar o descontar: Proyección a presente del valor de los flujos de caja futuros. Es el criterio empleado en la evaluación de la rentabilidad de los proyectos y representa el cálculo inverso a la capitalización compuesta. De este modo, si la fórmula para la capitalización compuesta es CF*(1+k)n, la fórmula para actualizar o descontar es CF/(1+k)n
CF: Flujos de caja
k: tasa (rentabilidad o intereses) sobre los que se proyecta el valor del dinero en el tiempo.
Al aplicar este principio en un estudio de rentabilidad, actualizamos los flujos de caja futuros descontando el rendimiento en base a una tasa predefinida. Esto nos ayuda a evaluar la viabilidad económica de un proyecto agrícola y tomar decisiones informadas sobre su rentabilidad.
2. Flujo de caja libre (FCF):
El flujo de caja libre es el flujo que se actualiza o descuenta en un estudio de rentabilidad. Contempla la caja generada por los activos objeto del proyecto con independencia a su financiación. Por tanto, el FCF considera:
- la caja generada por la explotación del negocio (ventas, compras, costes de estructura) ,
- No se tienen en cuenta los flujos derivados de la financiación
- Sí se tienen en cuenta la carga fiscal soportada.
- la caja generada por la inversión/desinversión en activos fijos y
- la caja derivada de la gestión de circulante, más concretamente, las necesidades operativas de fondos (cuentas de clientes, proveedores y stock). Es decir, excluimos cualquier partida correspondiente a financiación a corto plazo del circulante. A fin de simplificar el modelo, se suelen asumir cobros y pagos al contado.
3. Coste de capital medio ponderado (WACC) como tasa de descuento.
La financiación de cualquier proyecto puede afrontarse con recursos propios y/o ajenos. Ambos recursos conllevan un coste:
- Coste de la deuda: El más evidente, son los intereses o carga financiera de la misma. Es importante considerar el carácter deducible del coste financiero. De este modo, el coste de la deuda se representaría del siguiente modo:
(1-t)*Kd —> t=tipo impositivo; Kd=coste de la deuda;
- Coste de los recursos propios: Puede considerarse como la rentabilidad exigida que, a su vez, depende de la rentabilidad del mercado libre de riesgo (p.e. bonos del estado) a la que habría que añadir una prima. A diferencia de la deuda, no tiene carácter deducible. Se podría ilustrar de la siguiente forma:
Ke= Kf + PR —> Kf=rentabilidad libre de riesgo; PR= prima de riesgo.
El coste medio ponderado tendría en cuenta ambos costes según su participación en la financiación del proyecto:
WACC: (1-t)*Kd*Wd + Ke*We —> Wd =porcentaje deuda sobre total inversión We= porcentaje recursos propios
4. Rentabilidad económica Vs. Coste de capital medio ponderado (WACC):
Los flujos de caja libre (FCF) se actualizan considerando el coste de capital medio ponderado (WACC) como tasa de descuento. Es decir, a los flujos de caja futuros, se le deduce el coste de capital medio ponderado (coste deuda + rentabilidad exigida) de modo que, si la rentabilidad económica es superior al coste de capital medio ponderado, la inversión genera valor por lo que se aceptaría y viceversa. Esta lógica es muy conocida y se ilustra mediante la fórmula del Valor Actual Neto (VAN):
VAN= FCF0/(1+WACC)0 + FCF1/(1+WACC)1 + FCF2/(1+WACC)2 +……+ FCFn/(1+WACC)n
Por tanto, el coste de capital medio ponderado representa el nivel de exigencia a la que sometemos la inversión de manera que:
- Si VAN>0: La inversión genera valor dado que el proyecto “pasa el corte”, es decir, la rentabilidad económica del mismo es mayor al coste de capital
- Si VAN<0: La inversión “destruye valor” dado que el coste de capital es mayor que la rentabilidad del proyecto.
Por último, la tasa interna de retorno (TIR) representa la rentabilidad del proyecto. Es muy habitual definirla como la tasa de descuento que hace que VAN = 0, es decir, la rentabilidad del proyecto que igualaría al coste de capital medio ponderado. Por tanto, se deduce que:
- TIR > WACC —> VAN > 0
- TIR < WACC —> VAN < 0